jueves, 4 de diciembre de 2008

Atento

Atento.

Cruje la madera en los desvanes
viejos de la memoria.
Cruje
y parece hundirse la viga
postrada a la carcoma.

¿Oyes?

Las bisagras asedian al silencio
doliente del abandono.
¿Oyes
chirriar la puerta de la escalera?
¿Girar sobre su eje
toda esta madera hinchada?

Yo escucho
y salto de una a otra línea
del pentagrama.

Redonda,
la noche es larga en pesares,
y lento el quejido de la memoria.

18 comentarios:

Sarco Lange dijo...

Una costra de alzheimer en la casa vieja que cruje cuales huesos carcomidos por los años. Yo te aseguro que escucho todos esos sonidos apenas cierro los ojos con la ilusión de poder dormir. Y es mi cabeza la que suena vieja, vieja como un escombro innecesario.

El aceite no sirve. Las llamas tampoco.

Saludos y abrazos.

Nerina Thomas dijo...

El poeta no descansa. En su mente estan los ruidos. Debería llenarlos de pensamientos distintos. bello blog . un cariño

TORO SALVAJE dijo...

La memoria se pudre y con ella todo lo que fuímos.

Menudos dos tú y yo...

Besos.

Txe Peligro dijo...

casi puede oirse, cáspita

carlota dijo...

Y es que la noche todo lo magnifica. El silencio es amigo de la memoria, de los recuerdos, mayoritariamente de lo que duele... de todo lo que el día tapa con los ruidos.
Besitos

mia dijo...

Qué bella manera

de escribir

soñar y sentir...

El olvido es

quien cruje de

una sola vez...

Rasga maderos

y derrumba recuerdos!

Besos

Antonio Urdiales dijo...

Pero qué bien escribes, el final es sensacional, pero es que todo el poema es excelente.

Un abrazo.

Antonio

MarianGardi dijo...

Todo cruje, hasta tus pasos crujen en la pagina negra querida...
Besossss

Giovanni-Collazos dijo...

Tu poema descarga una gran fuerza, a pesar del halo de tristeza que percibo.

Un abrazo.

Gio.

Fernando dijo...

todo lo que tienes en el desván se acelera en la noche y te llama...a veces las bisagras son las que nos condenan a subsistir...te beso.

fgiucich dijo...

El archivo de la memoria que va dejando caer las hojas del recuerdo en medio de la noche. Abrazos.

Alicia Cañellas dijo...

Me encanta como escribes.

besotes y cuídate! (y disculpa mi ausencia... llevo días muy liada..)
Sigo aquí, eh! jejeje :-)

Anónimo dijo...

Es un silencio amenazante... como de una lluvia de gritos. Un beso que hace las veces de paraguas. Muá¡¡¡¡

thoti dijo...

.. hasta mis colinas solitarias llegan los crujidos de esa madera..
.. deseo que se pueda restaurar cada pilar de tu memoria..
.. un fuerte abrazo, Elisa..

A.G.V. dijo...

El crujir de las visagra ensordece mi madrugada, y hace que el silencio sea la presencia mas latente en mi diario vivir, auqnue el sentimiento de un temor no exista, vivo con el esperar de lo esperado...
Saludos...
A.G.V.

La sonrisa de Hiperion dijo...

"Yo escucho
y salto de una a otra línea
del pentagrama."

Precioso el poema.
Un saludo.

Antoni dijo...

Perfecta y preciosa la semejanza entre los distintos “quejios” Me pregunto a quien duele más el tiempo, ese dardo que continuamente cruza el aire. En la memoria hay un tiempo que se fue para ser tiempo y, también guarda su herrumbré de campana chirriando la alguaza contra las paredes del pecho.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Esa memoria que es un espejo con un filtro inconveniente.
Ese chirrido de la sagrada madera.
Esos espacios en nuestro sótano disfrazado de desvan.
No hay hoguera para quemar tanta carcoma.
Un abrazo!