Flores con fondo de agua
en el Parque Grande
19/10/2008
Para bien o para mal soy espíritu
de tarde y tormenta,
de charco y de hoja
seca al borde de la ribera.
Todavía llora en mis tímpanos
la lluvia aquella,
y callan cómplices las ramas
tristes de la chopera.
Saben de otras tardes más tiernas,
cuando,
intacta la fe y en blanco la memoria,
atesoraban secretos a voces
los anales de sus cortezas.
6 comentarios:
¿Cual es la omomapoteya de un suspiro? Pues esa.
Besitos :o)
De tarde no lo sé, pero de tormenta yo también soy espíritu.
Buen poema. Ya no es novedad.
Besos.
Tardes llenas de flores y recuerdos. Abrazos.
De extrema ternura, Elisa, y con la legancia por delante.
Un gran abrazo
Marian
¡Cuánta ternura y belleza!
Casi todos somos espíritu
de tormentas,
aunque algunos somos tormenta
en cuerpo y alma.
Un abrazo
.. ¡pero que bonito escribes y describes sentimientos!..
.. le pongo una matrícula de honor, jeje, a este poema.. es precioso, Elisa..
.. un beso, artista..
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