martes, 6 de octubre de 2009

2009

Qué largo este manojo de letras inconclusas.
Y el silencio grave
de la noche en mi cabeza.

Sólo grillos.
O miles de gallinas cacareando.
O una sólo
bramando tu nombre en la tormenta.
Y el eco insondable devolviendo
a mi boca esa palabra avinagrada.

2009,
con todos sus deseos agotados,
entre los charcos arrastra su burla de diablo.
Mañana es un niño hambriento,
una muchacha muda,
un silencio infinito
de tantas noches en mi cabeza.

4 comentarios:

thoti dijo...

.. wow..
.. como siempre me dejas solo diciendo:
..wow..

.. besos, artista..

Marian Raméntol dijo...

Precioso poema, Elisa, con un inicio espectacular....

Un abrazo
MArian

Anónimo dijo...

Muy bueno, Elisa, como siempre, supongo que habrá que tener esas noches tuyas en la cabeza para escribir así.

Besos.

lichazul dijo...

un manojo de letras , sí pero son hermosas y calidas
un ramillete de versos que desprenden esencias y aprendizajes

besitos de luz elisa